Ilusiones Matemáticas Volumen 1
Aurelio Sánchez Estévez
978-84-15058-52-6320 págs.
Encuadernación: rústica
Formato: 21cmx17cm
Después del placer de asombrarse no hay ninguno mayor que el de sorprender.
Charles Baudelaire, Pequeños Poemas en Prosa
Principios y curiosidades que te ayudarán a entender la estructura matemática interna de juegos de magia, acertijos, rompecabezas e ilusiones ópticas,
y a crear nuevas e increíbles ilusiones.
¿Es posible descubrir las matemáticas de la mano de la magia?
Aurelio Sánchez no escribió un libro. Preparó una caja de sorpresas. El rigor de la clasificación matemática convierte lo que podría ser un cajón de sastre en una obra en la que todo está donde le corresponde. Cada nuevo capítulo es un descubrimiento luminoso, fascinante, pasando con toda naturalidad de un entorno al siguiente.
El autor te sacude con inesperadas asociaciones entre ilusiones y principios o teorías científicas a través de una prosa sencilla y accesible. El cruce que propone entre la Mnemónica de Juan Tamariz y el cálculo matricial para analizar el juego «Adivinación de varias cartas pensadas» es lógico y asombroso. El manejo simplificado de la versión de Simon Aronson del «Juego de Raynaly» o el estudio completo que ofrece de los rompecabezas geométricos de Winston Freer, Martin Gardner, Paul Curry… Los objetos imposibles de Kokichi Sugihara, el análisis armónico de las imágenes híbridas, son solo algunas de las maravillosas curiosidades de esta magnífica obra.
No sé qué admirar más, si la selección del material, la claridad de las explicaciones o la creatividad en la divulgación matemática. Aurelio se sale con la suya: hace magia escribiendo y de paso, nos hechiza con las matemáticas.
Me hubiera gustado leer antes Ilusiones Matemáticas, pero como es imposible recuperar el tiempo perdido lo compensaré leyendo, releyendo, estudiando y disfrutando este originalísimo, excelente, documentado y estimulante trabajo de Aurelio Sánchez.
Camilo Vázquez
Agradecimientos
Dedicatoria
Volumen I
Prólogos
Camilo Vázquez
Eduardo Sáenz de Cabezón
Introducción
Ilusiones aritméticas
Conteo. Ovejas y ladrones
Antiguos problemas recreativos en Rusia
Las matemáticas de la noche de Reyes
Cálculos mentales asombrosos
Cómo saber el día de la semana de cualquier fecha
El principio de paridad
Ilusiones algebraicas
Adivinación del número pensado
Lector de pensamiento
El libro primer libro de matemáticas recreativas: De Viribus Quantitatis
Adivinación de varias cartas pensadas
Un juego con la sucesión de Fibonacci
Ilusiones analíticas
De la Tierra a la Luna con una hoja de papel
Imágenes híbridas
Ilusiones geométricas
El tangram
Los triángulos de Curry
Rompecabezas de aparición y desaparición
Principio de la distribución oculta
Ghost puzzle de Tenyo
The Brick Wall – Robert E. Neale
Rompecabezas de Winston Freer
Las matemáticas en el arte de Escher
Las ilusiones ópticas de Kokichi Sugihara
Anamorfosis
Curvas y sólidos de anchura constante
Simetría y asimetría
La ilusión de Jastrow
A los siete u ocho años tuve la primera experiencia como espectador de magia de cerca. Sentí por primera vez esa sensación nueva, difícil de describir, de contemplar algo incomprensible y sorprendente. No fue en un teatro, ni en un salón, ni en una charla de sobremesa —todo eso vendría mucho más adelante—, sino en un cruce de caminos en Gondomar, pueblo pontevedrés, cercano a Baiona, desde donde estoy escribiendo estas líneas.
Un amigo y compañero de mi edad cogió siete piedrecillas y, sentados ambos en el suelo de tierra, me hizo el juego de los ladrones y los corderos. Todavía hoy, más de setenta años después, lo recuerdo vívidamente y sigo mostrando una versión personal de este efecto en actuaciones y conferencias.
Y esto viene a cuento porque la primera sorpresa, el primer tema en este primer volumen, después de la introducción y declaración de intenciones, versa precisamente sobre este asunto: una versión simple pero muy práctica y eficaz que Aurelio asocia al proceso de conteo.
A partir de aquí me encuentro, en cada nuevo capítulo, los más dispares juegos e ilusiones, precedidos por un escueto y accesible concepto matemático y adornados o vestidos con una presentación, charla o envoltura que le viene como anillo al dedo.
No sé qué admirar más: la selección del material, la claridad de las explicaciones, incluida la divulgación matemática, las inesperadas asociaciones entre ilusiones y teorías científicas… Quizás, una de las cosas que más me llamó la atención es que una serie de efectos, como dije antes, tan heterogéneos, resulten armonizados para ser encerrados entre las tapas de dos libros, acoplados a la estructura de las diferentes ramas matemáticas.
Ahora sí, todo resulta lógico. El rigor de la clasificación matemática convierte lo que podría ser un cajón de sastre en una obra en la que todo está donde le corresponde, y donde cada nuevo capítulo es un descubrimiento luminoso, una sorpresa, pasando con toda naturalidad de un entorno al siguiente.
No quiero enumerar aquí, por innecesario, todas las sorpresas que me deparó la lectura. Bastaría repetir el índice de la obra. Así que citaré un par de ellas: Asombroso, aunque lógico, el cruce de la Mnemónica de Juan Tamariz con el cálculo matricial para analizar el juego «Adivinación de varias cartas pensadas», la versión de Simon Aronson del conocido en Francia como «Juego de Raynaly», publicado por primera vez en 1900 por Edwin Sachs en su libro Sleight of Hand. Otro juego incluido en mi repertorio habitual un par de décadas después de los bucólicos corderos, y en una versión, descrita en El Arte de la Magia de George Kaplan, a medio camino entre la original y la –para mí– definitiva, aquí incluida.
¡Pero queda tanto por destacar! Con especial cariño, disfruté el completo estudio de los rompecabezas geométricos de Winston Freer, Martin Gardner, Paul Curry y otros. Los objetos imposibles de Kokichi Sugihara (por cierto, acabo de conseguir un ejemplar de la alucinante flecha cuyo sentido no se puede cambiar por más que se gire, ¡ver para creer!). El análisis armónico de las imágenes híbridas. Y tantas, tantas otras maravillosas curiosidades.
En conclusión, también a mí me hubiera gustado haber leído esta obra hace varias décadas, como confiesa el autor que, con toda propiedad, utiliza en el título el vocablo Ilusiones, más amplio y genérico que su derivado Ilusionismo, incluyendo no solo efectos mágicos sino otros afines, como los ya citados.
Como es imposible recuperar el tiempo perdido lo compensaré leyendo, releyendo, estudiando y disfrutando este originalísimo, excelente, documentado y estimulante trabajo de Aurelio Sánchez.
¡Asombroso!
Camilo Vázquez
Hace tiempo acudí a una conferencia de Aurelio y fue un agradable decubrimiento. Desde entonces sigo su blog y he acudido a alguna de sus ponencias. Los libros me han encantado. La edición es espectacular y el contenido es, sencillamente, excelente. Son unos libros para degustarlos con tiempo. Juegos, curiosidades matemáticas, su relación con el arte y la magia... se abordan de una manera muy didáctica.
Los dos libros que componen la obra son muy completos y están muy bien estructurados con una redacción que consigue que todo se entienda fácilmente y de forma muy amena. Soy de letras puras y estos libros crean magia: que sabiendo sólo matemáticas muy ( pero que muy) básicas se pueda entender todo ¡ y en la primera lectura! Con profusión de citas a las fuentes de información, multitud de ilustraciones y fotografías en color que acompañan y amplían lo explicado en el texto, con ejemplos claros, enlaces a webs, muchas curiosidades y aplicaciones prácticas a juegos de ilusionismo en una edición propia de Páginas, muy cuidada. (*) Y con algún toque de humor: por ejemplo, sabrás el número de folios que necesarios para llegar de la Tierra a la luna.